El producto mínimo viable (MVP por sus siglas en inglés) es una versión del producto que permite evaluar su potencial en el mercado. Cuenta exclusivamente con las funciones básicas para satisfacer necesidades específicas de los clientes.

En este artículo explicaremos por qué es importante un MVP, cuáles son sus tipos y daremos algunos consejos en cómo construir esta versión de producto para tu empresa.

Por qué es importante el Producto Mínimo Viable

De acuerdo al National Business Capital, el 21.5% de nuevas empresas fracasan en su primer año y hasta un 30% lo hacen durante su segundo año de existencia. Bien pueden ser muchas y variadas razones como problemas legales, competencia muy intensa, falta de financiamiento o de compromiso de los miembros del equipo, modelo de negocios deficiente, entre muchos otros. La realidad es que es posible predecir y evitar algunos de estos problemas con la ayuda de un producto mínimo viable.

Un MVP contiene solamente las características esenciales para brindar a los clientes solamente las soluciones necesarias. De hecho, es común confundir este concepto con un prototipo, la diferencia es que el MVP es un producto que ya se ha lanzado al mercado, mientras que un prototipo es solamente un modelo.

Un producto mínimo viable le permite a los empresarios tener opiniones de valor, de primera mano, respecto a su producto. La empresa lanza el producto al mercado con un número limitado de características y recursos. De esta manera se puede evaluar el potencial del producto antes de hacer grandes inversiones de producción y publicidad.

El MVP permite analizar un flujo significativo de retroalimentación con lo que se podrá decidir si este producto es necesario en el mercado, si es competitivo y si cumple con las expectativas y necesidades de la audiencia.

Por ejemplo, a continuación puedes ver el proceso de creación y desarrollo de un MVP. La primera secuencia muestra más bien un diseño progresivo, los productos anteriores realmente no se pueden usar de forma práctica, mientras que la segunda muestra cómo se llega a un MVP que sí satisface al cliente, y realmente todos los productos anteriores se podrían utilizar, aunque tal vez se podría considerar que son más de nicho o que cumplirán solamente con necesidades muy específicas.

Fuente: Northell

A continuación, vamos a explorar de manera más profunda los beneficios de un producto mínimo viable.

Beneficios del MVP

El producir un producto mínimo viable te puede ayudar a prevenir una gran cantidad de obstáculos que tal vez no consideraste en un inicio sobre tu producto. Con esta versión puedes tener un panorama más completo de cómo funcionaría en el mercado. Así, algunos de sus beneficios más importantes son los siguientes:

  1. Un MVP permite analizar la demanda. Cuando tienes la idea de un gran producto, puedes pensar que todos lo necesitan, pero no lo puedes asegurar hasta que lo compruebas. Puede suceder, y es común el caso, de que tu producto no tenga lugar en el mercado o que otros ya existentes satisfacen, y mejor, a tus clientes. Para ello, construir un MVP te ayudará a evitar a querer adivinar lo que quiere el mercado y podrás evitar desperdiciar mucho dinero.
  2. Un MVP hace más fácil recibir inversiones. Necesitas convencer a los inversionistas de que tu empresa vale el esfuerzo y el dinero y, bien sabemos, necesitas más que palabras bonitas para ello. Ahí es donde entra un MVP, un producto que ya lanzaste al mercado y que tus inversionistas pueden evaluar para considerar si desean confiarte su dinero.
  3. Un MVP permite probar la usabilidad del producto. El que se logren cientos y cientos de ventas, no significa que se tenga éxito, sobre todo si el cliente no sabe usar tu producto. Con un MVP puedes evaluar si tu producto es fácil de usar o es muy complicado, es fácil que los clientesmlo abandonen y, justamente, podrás hacer cambios en su funcionamiento para brindar una mejor experiencia.
  4. Un MVP ayuda a crear mejores productos. Un producto mínimo viable permite que te enfoques en las características principales que podrán satisfacer a tu audiencia. Te ayuda a que lo pruebes, que entiendas qué es lo que la gente disfruta de él, lo que a la gente no le gusta y cuáles son las soluciones que puedes realizar. Así, también harás sentir a tus clientes que participaron en el desarrollo de un producto de calidad.
  5. Un MVP asegura un lanzamiento rápido y sencillo. Es común que se invierta una gran cantidad de recursos en un producto en el que no se tiene completa confianza. Un MVP permite que los procesos de desarrollo y lanzamiento sean más cortos y entre más rápido se lance un producto, más rápido se tendrá retroalimentación y más rápido se podrán hacer los cambios necesarios.
  6. Un MVP logrará que tus clientes se sientan felices. La realidad es que los consumidores prefieren a las marcas que los escuchan y aprecian su opinión. Con un MVP justamente les brindas esta herramienta a tus clientes, creas confianza y promueves su lealtad a tu marca.

Hay distintos tipos de MVP que puedes usar para tu negocio. A continuación vamos a revisar cuáles son.

5 Tipos de MVP

Ahora que ya conoces los beneficios de un producto mínimo viable, te vamos a explicar a detalles cuáles son los 5 tipos más comunes de MVP.

  1. Conserje. Este tipo de MVP implica resolver las preocupaciones de los clientes sin lanzar ningún producto, servicio, ni siquiera sitio web. Por ejemplo, si quieres lanzar una aplicación de programas de dietas, de acuerdo a los objetivos de clientes, puedes hacer encuestas y preguntar a la audiencia directamente qué es lo que quiere. Tal vez sea un MVP que requiere mucho trabajo, pero es uno que ofrece muchísima información.
  2. Mago de Oz. Aquí, el objetivo principal es mostrar que el producto será un servicio completo basado en la automatización. Tal vez en un inicio debas hacerlo todo tú detrás de la cortina, pero el cliente debe entender que tu producto solucionará sus necesidades de forma automática.
  3. Landing page. Este MVP implica crear una landing page en la que describas todas las ventajas de tu producto y les brindes una opción a tus clientes de que lo adquieran. Las ventajas de este MVP es que te permite recolectar los correos electrónicos de tus clientes y hablarles directamente sobre tu producto, también puedes analizar la demanda y cómo interactuaron tus clientes para hacer los cambios necesarios.
  4. Videos explicativos. Tal vez un video sea la mejor forma de describir y mostrar un producto. Te permite demostrar cómo funciona y qué es lo que lo hace especial. Con este tipo de MVP podrás introducir tu producto a la audiencia y también podrás registrar el compromiso con el producto y analizar su demanda.
  5. MVP en Pre-venta. Este MVP es la mejor opción para los negocios que necesitan mucha inversión y que los clientes accedan a su producto. Así, los clientes pueden invertir su dinero durante el desarrollo del producto a través de una pre-venta y se puede calcular el potencial del producto, el interés y recibir ese primer flujo de ganancias.

Ahora que conoces distintos tipos de MVP y que, muy seguramente, ya sabes cuál es el mejor para tu negocio, vamos a explicar los pasos para crear uno.

Cómo construir un Mínimo Producto Viable

Lo más importante, al crear un MVP, es enfocarte en resaltar las características principales, olvídate de todo lo que lo haga complicado o requiera muchos recursos. Para crear tu MVP, te recomendamos que sigas las siguientes 4 recomendaciones:

  1. Estudia tu mercado. Es fundamental entender las preocupaciones y necesidades de tu audiencia. Con análisis de mercado sabrás la necesidad de producto, qué les falta a los competidores o si ya los clientes tienen solucionada esa preocupación. Conocer la problemática, te ayudará a transformarla en tu ventaja competitiva.
  2. Investiga el recorrido del cliente. Necesitas pensar tu producto desde la perspectiva del usuario. Identifica cómo es que el cliente llega a tu producto, qué lo atrae, qué lo convence, si tiene problemas al interactuar con él o si lo abandona. Así, tú podrás ir construyendo su camino y hacer que sea uno más placentero y cómodo de recorrer.
  3. Jerarquiza las características del producto. Un producto mínimo viable cuenta únicamente con las características básicas, para seleccionarlas, debes saber cuáles son las más importantes, cuáles son las que realmente resuelven el problema del cliente. Debes tener en claro cuáles son las características imprescindibles y las demás las puedes dejar para hacer mejoras futuras.
  4. Lanza, recopila y haz nuevas versiones. Pregúntale a tus clientes si están satisfechos con tu producto, si cumple con sus expectativas, si hay problemas que no haya solucionado y qué es lo que podrías mejorar. Recopila detalladamente cada respuesta y analiza la información, así podrás desarrollar nuevas versiones que sean un mejor producto.

Antes de terminar, queremos darte un par de ejemplos extraordinarios del producto mínimo viable de marcas reconocidas.

Ejemplos de MVP

Los siguientes ejemplos de MVP te mostrarán lo importante que es tener uno y cómo te pueden ayudar a lanzar un producto con éxito.

Dropbox

Antes de que Dropbox se convirtiera en líder en servicios de archivos en la nube, Drew Houston, su CEO, decidió que se lanzara un video describiendo las ventajas y el funcionamiento del servicio. Ese video tuvo más de 70 mil reproducciones en una sola noche. Sobre decir que el lanzamiento de Dropbox fue un éxito contundente.

Amazon

Jeff Bezos usó un Mago de Oz, antes de lanzar Amazon, recibió órdenes de libros, compró él mismo los libros y los mandó él mismo a los clientes. La gran cantidad de ventas fue la confirmación necesaria de que la gente quería este servicio. Así que comenzó comprando más libros, una bodega y se hizo Amazon.

Ahora ya sabrás lo importante que es tener un producto mínimo viable, cómo es que le ayuda a todas las empresas, sobre todo a las emergentes y emprendimientos y cómo las convierte en marcas reconocidas. ¡Éxito!

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