Los errores siempre suceden y es algo común llegar a situaciones donde por un descuido o problema técnico publicamos por equivocación algo que no debíamos en nuestras redes sociales o peor aún en las redes sociales de nuestro negocio. Sin embargo, a pesar de ser algo muy común, la realidad es que poco se ha hablado sobre cómo manejar este tipo de inconvenientes.
Es probable que te haya pasado que publicas por error en la página de tu negocio, tu opinión sobre un político o algún otro tema sensible y consigas una imagen negativa o se arme una batalla campal en la sección de comentarios de la publicación.
Incluso, se puede dar el caso que cometas un error tipográfico en la publicación y te lleguen mensajes negativos, simplemente por confundir una “c” con una “z”.
Por ello, a continuación te presentamos los pasos que tienes que seguir para manejar este tipo de situaciones y sobre todo para minimizar que sucedan dentro de tu ambiente profesional.
Paso 1: Determinar la trascendencia del error
En este punto se tiene que analizar rápidamente cuáles serán las posibles consecuencias que puede conllevar la publicación. Si de plano es alguna publicación ofensiva o una publicación relacionada con tus afinidades políticas o religiosas, lo más conveniente es eliminarla en ese preciso momento.
Ahora, si es un pequeño problema de dobles sentidos, puedes tomar provecho de la situación y utilizarlo a tu favor. Es común que muchos usuarios de internet hagan bromas y memes al respecto, así que puedes apalancarte de ello para alcanzar un poco de viralidad. Es importante aprender de los errores e impulsarte de ellos.
Si es un error de gramática u ortografía dentro del copy, puedes editarlo fácilmente en redes sociales como Facebook u Instagram y no representa algo de mucha consideración. Ahora, si es en Twitter donde no se permite editar los tuits tienes la opción de eliminarlo. A diferencia de las otras redes sociales mencionadas, Twitter es una plataforma donde no está mal visto eliminar el contenido rápidamente.
Otro de los aspectos a considerar es la relevancia que puede tener tu publicación en un futuro. ¿Qué quiere decir esto? Puede ser que dentro del contexto actual no represente mucho, pero en algunos años puede convertirse en un arma de doble filo para dañar la reputación de tu marca.
Por ejemplo, se han dado muchos casos de figuras públicas que han tuiteado de manera negativa sobre temas de feminismo, racismo o violencia cuando estos temas no tenían tanta repercusión y hasta cierto punto estaban normalizados. Sin embargo, en 2021 estos temas son parte de la agenda política y son sensibles.
Paso 2: Analizar las opciones
Pero antes de tomar una decisión sobre el camino que vas a tomar, es importante que hagas un análisis rápido de las opciones: cuáles serían los pros y los contras de dejar la publicación, en el caso de que no se haya eliminado.
Recuerda que este análisis debe ser inmediato desde que te diste cuenta del error. Es importante que no pase mucho tiempo porque algunos usuarios pueden aprovechar ese tiempo para poder tomar una captura de pantalla y lastimar tu imagen de marca.
Es recomendable desarrollar esta habilidad de pensamiento crítico para determinar y analizar las opciones en el menor tiempo posible.
Dentro de tus opciones plantéate la posibilidad de “fingir demencia” sobre lo sucedido; es decir, hacer como si nada hubiera pasado e ignorar el error.
En muchos casos (cuando son pequeños errores) las personas no se fijan en un acento, en una coma o en una imagen de mala calidad. Justamente en esos casos, lo mejor es pretender que nada pasó, pero eso lo tendrás que determinar tú en función del caso presentado. No olvides que muchas veces las mejores soluciones son las más simples.
Paso 3: Tomar la decisión y asumir la responsabilidad
Es importante que tomes la decisión con toda la seguridad del mundo y que sepas que al final de cuentas siempre puede salir algo de manera diferente, por lo que debes de estar dispuesto a asumir todas las consecuencias.
Si llegaste a publicar algo que pudo haber sido ofensivo o que pudo salirse de contexto, lo mejor es pedir una disculpa pública y prometer a la audiencia que estas situaciones no volverán a pasar. Muchas veces, las personas esperan solo una disculpa sincera.
Eso sí, tienes que asegurarte de que la disculpa que realices no sea banal y que de verdad sirva para poder limpiar la imagen de tu marca.
Paso 4: Prevenir: automatizar procesos
Los errores siempre sucederán, así que tienes que estar completamente preparado para ellos, por eso nuestra principal recomendación es que automatices todos los procesos que puedas.
La automatización del marketing es una de las mejores maneras de reducir errores porque te permite programar todo una vez que haya pasado por cierto número de filtros y revisiones.
En el caso de redes sociales, lo mejor es tener un calendario definido de cuándo, cómo y qué publicar. Teniendo un calendario podrás escoger un día de la semana para crear todo el contenido y programarlo a través de las herramientas que te traen las mismas plataformas. Por ejemplo, desde el Facebook Creator puedes calendarizar tus publicaciones para Instagram y Facebook.
Existen otras herramientas que se pueden utilizar para la publicación como Hootsuite, que son excelentes opciones.
Asegúrate de seguir estos 4 pasos para manejar este tipo de situaciones y sobre todo para evitar que sucedan más a menudo. Pero, si te llegan a suceder recuerda que es totalmente normal y que no pasa nada malo, somos humanos y equivocarnos está dentro de nuestra esencia, antes de atormentarnos por publicar algo indebido, lo mejor que podemos hacer es encontrar una solución.
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